Reducirá la conducta de picaje y canibalismo porqué sus aves estarán más tranquilas.
De esta manera, se reducirá la elevada mortalidad y las pérdidas económicas asociadas a este comportamiento.
Reducirá la conducta de picaje y canibalismo porqué sus aves estarán más tranquilas.
De esta manera, se reducirá la elevada mortalidad y las pérdidas económicas asociadas a este comportamiento.
Disminuirá la cantidad de alas rotas y pechugas amoratadas, causa de decomisos en matadero, y de las consecuentes pérdidas económicas.
Sus animales estarán más tranquilos durante el manejo, carga, descarga y durante los tiempos de espera al sacrificio.
Reducirá las bajas por estrés térmicos y su impacto económico.
Los animales tendrán mayor capacidad de regular su temperatura corporal, adaptándose mejor a las altas temperaturas en verano, que evitará el golpe de calor